El consentimiento informado es una piedra angular de la práctica ética y legal en la psicoterapia, especialmente cuando se trabaja con niños, niñas y adolescentes. Sin embargo, aún muchas personas se preguntan: ¿qué significa realmente el consentimiento informado cuando el paciente es menor de edad? ¿Cómo pueden los terapeutas equilibrar las obligaciones legales, los estándares éticos y la autonomía progresiva de los jóvenes?
Este artículo analiza los aspectos fundamentales del consentimiento informado en la psicoterapia de menores, tomando como referencia el marco legal argentino, las convenciones internacionales y los códigos de ética que regulan la práctica profesional. Comprender estos matices puede mejorar significativamente los resultados terapéuticos y fortalecer la confianza entre terapeutas, pacientes jóvenes y sus familias.
¿Qué es el consentimiento informado en psicoterapia para menores?
El consentimiento informado no es simplemente un trámite; es un proceso dinámico de diálogo y comprensión. En psicoterapia con menores, implica que el adulto responsable —generalmente el padre, madre o tutor— debe dar su consentimiento tras recibir del terapeuta información clara, suficiente y comprensible.
Pero hay más: también debe considerarse la opinión y disposición del propio menor, reflejando el principio de capacidad progresiva reconocido tanto en el Código Civil y Comercial argentino como en instrumentos internacionales como la Convención sobre los Derechos del Niño.
Fundamentos legales del consentimiento informado para menores en Argentina
Diversas normativas establecen los lineamientos del consentimiento informado para menores en psicoterapia:
- Código Civil y Comercial de la Nación (especialmente artículos 25, 26, 59 y 641–642)
- Ley 26.061: Protección integral de los derechos de niños, niñas y adolescentes
- Ley 26.529: Derechos del paciente en su relación con los profesionales e instituciones de la salud
- Ley 26.657: Derecho a la protección de la salud mental
Estas normas reconocen que, si bien en principio los adultos responsables deben consentir, los adolescentes entre 13 y 16 años pueden brindar su consentimiento por sí mismos para tratamientos no invasivos. A partir de los 16 años, se considera que el adolescente puede tomar decisiones relativas a su salud como si fuera un adulto.
Aspectos éticos: construir confianza y autonomía
Más allá del marco legal, la ética ocupa un rol fundamental. Según los códigos de ética de la Federación de Psicólogos de la República Argentina (FePRA) y de la American Psychological Association (APA), los psicólogos deben no solo informar a los representantes legales, sino también procurar el asentimiento del propio menor, siempre que sea posible.
La información brindada debe ser:
- Clara y adecuada a la edad
- Suficiente para una decisión informada, sin saturar al paciente
- Respetuosa de la autonomía y el crecimiento del niño o adolescente
De este modo, la psicoterapia con menores se convierte en un proceso colaborativo, equilibrando la autoridad parental con el respeto a la evolución de la autonomía del paciente joven.
Consideraciones prácticas para los terapeutas
Para cumplir adecuadamente con los estándares legales y éticos, los psicólogos deberían:
- Documentar el consentimiento informado, preferiblemente por escrito.
- Renovar el consentimiento si se modifican aspectos relevantes del tratamiento.
- Respetar el derecho de retirar el consentimiento en cualquier momento.
- Evaluar cuidadosamente los escenarios de custodia y las relaciones familiares.
- Tener siempre presente la voluntad y madurez del menor.
El papel clave de la capacidad progresiva
La capacidad progresiva implica que los niños y adolescentes adquieren, de manera gradual, la habilidad para tomar decisiones sobre su vida y su salud.
Ignorar este principio puede dañar la alianza terapéutica y vulnerar derechos fundamentales. Por eso, no se trata solo de obtener un consentimiento inicial, sino de sostener un consentimiento vivo y renovado a lo largo de la terapia.
Conclusión
El consentimiento informado en psicoterapia infantil y adolescente no es un simple requisito burocrático: es una garantía esencial de dignidad, autonomía y confianza. Los terapeutas que comprenden y respetan estas directrices no solo protegen sus prácticas, sino que además empoderan a los pacientes jóvenes, fortalecen los vínculos familiares y elevan los estándares profesionales.
Aplicar correctamente el consentimiento informado transforma la psicoterapia en un viaje compartido hacia la sanación, la comprensión y el crecimiento personal.
Referencias:
- Sánchez Mas, C. A. (2025). El consentimiento informado de pacientes menores de edad en psicoterapia. Anales de la Universidad Notarial Argentina, N° 2.
- Ley 26.061, Ley 26.529, Ley 26.657, Código Civil y Comercial de la Nación (Argentina).
- Código de Ética de la Federación de Psicólogos de la República Argentina (FePRA).
- Principios Éticos de la American Psychological Association (APA).
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